domingo, 18 de diciembre de 2011

¿Regalitos de último minuto? ¡No te preocupes! "Sweet tree bark" al rescate...

Sweet tree bark
Sorry por haberlos hecho esperar tanto para otro post... estas últimas semanas han sido de locura, entre preparar galletitas de azúcar para reuniones navideñas (les dejo solo una foto, pues el procedimiento lo pueden encontrar en mi post de las galletas de Halloween), galletitas de mantequilla para un intercambio de dulces navideños (será para otro post pues en mi apuro me olvidé de tomar una foto al producto final antes que se las comieran!) y finalmente todos nos enfermamos con un virus del mal que trajo mi hijito mayor del nido y estuve sin voz y con fiebre toda la semana. Pero, ¡ya estoy de vuelta!

El tema de este post es en cierta forma "de último minuto", pero ¿a quién no le pasa que llega el 23 de Diciembre y se da cuenta que le falto un detallito para la vecina que vino a dejar unas galletitas, o para la tía que nunca viene pero que se le ocurrió visitar y traer un panetón?



Galletitas navideñas
 Yo tenía planeado preparar galletitas de mantequilla para las profes del nido de mi hijito y había preparado mi masa con anticipación... ayer la saqué de la refrigeradora y ¡no sé por qué se había puesto rancia! Casi me da ataque, pues ya no tenía ni ingredientes ni tiempo de ponerme a preparar masa para 60 galletas... y luego hornearlas y decorarlas. Pensando, pensando, se me iluminó el foquito... ¡"Sweet tree bark"! Este dulce lo llevó mi amiga Jen al intercambio de dulces navideños del que les había hablado, y la verdad me pareció delicioso. Le pedí la receta y es facilísimo de hacer, así que me cayó a pelo.



Acá les traigo la receta. Rinde para 6 a 8 "regalitos". ¡Espero que les guste!

Vas a necesitar:
Una lata para galletas
Papel aluminio
48 galletas de soda (aproximadamente lo que necesitas para cubrir una lata de galletas)
1 taza (225 gramos) de mantequilla ***NO margarina***
1 taza (200 gramos) de azúcar rubia
1 paquete (aproximadamente 350 gramos) de chispas de chocolate bitter o semi-dulce*
1 paquete (aproximadamente 350 gramos) de chispas de chocolate blanco*
Grageas de colores o nueces picadas y tostadas para espolvorear (opcional)

*Utiliza chocolate de buena calidad pues se va a sentir la diferencia en el producto final. Si no consiguieras chispas, puedes utilizar trozos de chocolate.

Preparación:
1. Precalienta el horno a 200ºC (aproximadamente 400ºF).

2. Cubre la lata de galletas con papel aluminio y acomoda las galletas formando una capa.
Capa de galletas de soda
3. En una olla, derrite la mantequilla y el azúcar rubia. Una vez que se hayan derretido por completo, deja hervir la mezcla por 3 minutos.

Mezcla de azúcar rubia y mantequilla
 4. Vierte la mezcla de mantequilla y azúcar rubia sobre las galletas de soda. Hornea por 5 minutos hasta que se forme un caramelo con burbujitas y las galletas "floten".
Galletas de soda bañadas en caramelo
Burbujitas en el caramelo recién salido del horno
 5. Inmediatamente esparce las chispas de chocolate bitter y blanco sobre las galletas con caramelo caliente. Puedes meter la bandeja 1 minuto más al horno para que se derrita el chocolate.
Chispas de chocolate sobre las galletas
 6. Esparce el chocolate con una espátula, cubriendo lo mejor posible toda la superficie. Trata de no combinarlo mucho para que aún se distinga un poco el chocolate amargo (bitter) del blanco. Si las estuvieses usando, espolvorea con las grageas o las nueces picadas y tostadas.
Chocolate derretido sobre las galletas
 7. Lleva a la congeladora por lo menos 1 a 2 horas hasta que el chocolate y el caramelo se hayan solidificado por completo
Recién salido de la congeladora
 8. Desprende el aluminio de la bandeja y rompe las galletas con chocolate en pedazos, utilizando las manos. La idea es que queden pedazos no uniformes, como si se tratara de trozos de corteza de árbol (de ahí el nombre "Sweet Tree Bark" que significa "Corteza de árbol dulce")
Sweet tree bark
 ¡Espero que te guste tanto como a mi! Yo soy super fanática de las Chocosodas jajaja, así que creo que por ahí viene mi obsesión con este dulce ;)

lunes, 5 de diciembre de 2011

Pastel de poros, ¡cremosito y delicioso!

La semana pasada mi cocina estuvo trabajando a mil por hora. El sábado teníamos un brunch navideño en la casa de una amiga y yo era una de las encargadas de cocinar. Preparé dos tipos de muffins (plátano con nueces y chispas de chocolate, y arándanos con naranja y almendras), un cerro de galletas navideñas decoradas y un pastelito de poros.
Pastel de poros

El pastel de poros fue todo un hit, así que acá se los traigo. Para la masa pueden utilizar la misma receta de la que utilizo en el pie de manzana (con agua en lugar de jugo de manzana) o en el pie de limón de mi antiguo blog "Rincón Repostero", o emplear cualquier otra receta que tengan a la mano. También pueden utilizar masa ya lista, si es que la flojera los agarra desprevenidos ;). Yo utilicé una masa que había preparado y congelado hace tiempo, así que no estoy incluyendo esa parte del procedimiento en este post.

Vas a necesitar (para un molde chato de 25 cm de diámetro o un molde más alto de 20 cm de diámetro):

Masa para cubrir el molde
1 kg de poros
6 cucharadas (90 gramos) de mantequilla sin sal
1 cucharadita de sal
2 cucharadas de agua
4 yemas de huevo (guarda las claras para otra receta, como ésta, por ejemplo)
1 1/4 tazas (300 mL) de crema de leche o leche evaporada pura*
Sal, pimienta y nuez moscada rallada, al gusto

*queda más cremoso con la crema de leche, pero puedes utilizar leche evaporada si prefieres un pastel menos pesado.

¡Manos a la obra!

1. Precalienta el horno a 200ºC (aproximadamente 400ºF).

2. Estira la masa y cubre el molde que vayas a utilizar. Te recomiendo que leas mis posts del pie de manzana y el pie de limón para ideas de cómo hacer esto. Yo no hice "horneado en ciego" para este pastel, pero puedes hacerlo si prefieres que la masa quede crocante en la base. La explicación para hacer el horneado en ciego la encuentras aquí, a partir del paso 10.
Masa en el molde
3. Lava muy bien los poros. Yo les corto el extremo un poquito (donde termina la parte blanca y hay algunas raíces), los corto a lo largo por la mitad y los lavo bien entre las "capas", pues suelen acumular bastante tierra. Luego cortalos en rodajas de aproximadamente 1 cm de ancho. Solo utiliza la parte blanca y la parte verde clara. La parte verde oscura puedes guardarla para agregarla a alguna sopa (la puedes congelar en una bolsita bien cerrada).

4. Coloca los poros en rodajas, la mantequilla, la cucharadita de sal y el agua en una olla. Mezcla bien hasta que la mantequilla se derrita y cubra todo el poro. Tapa y cocina a fuego bajo por 30 minutos. Destapa y sigue cocinando hasta que se evapore el líquido. Ten cuidado de no quemarlos.

Poros antes de cocinarse
Poros una vez cocidos
 5. Mientras el relleno de poros enfría, coloca las yemas de huevo y la crema de leche (o leche evaporada) en un recipiente. Sazona al gusto con sal, pimienta y nuez moscada rallada y bate bien.
 
Crema de leche, yemas, sal, pimienta y nuez moscada

Mezcla batida
 6. Vierte la mezcla de poros ya fría sobre la masa (cruda o cocida, dependiendo de si utilizaste el "horneado en ciego" o no).

Mezcla de poros sobre la masa

7. Vierte la mezcla de crema de leche y yemas sobre los poros, y espárcela con un tenedor. Ten cuidado de no pinchar la masa. Lleva al horno por 30 minutos o hasta que tome un color dorado pálido.

Pastel en el horno
Sírvelo tibio, ¡espero que te guste!

También puedes omitir la masa y hornear solo el relleno (poros y crema) en un pyrex. Queda muy rico también ;)